Las estaciones de transferencia son instalaciones donde se compactan los residuos por fracciones para ser trasladados a las plantas de tratamiento mediante camiones de elevada capacidad.
Existen estaciones de transferencia en Alcudia, Binissalem, Campos, Manacor y Calviá en las que se concentran los residuos de los municipios de sus respectivas áreas de influencia. Su función es evitar que los camiones de recogida domiciliaria de residuos sólidos urbanos tengan que cubrir grandes distancias, optimizando así los medios humanos y mecánicos.
Los camiones de recogida domiciliaria no tienen que cubrir grandes distancias para el transporte de residuos.
Permite una reducción en los costes del servicio de recogida municipal domiciliaria.
Reduce el tráfico por carretera en un 65% y con ello aumenta la seguridad vial del transporte.
Imposibilita la contaminación por olores o dispersión de residuos al trasladarlos en contenedores herméticamente cerrados.
La valorización material consiste en transformar los residuos en recursos. Con base en este principio disponemos de recuperación de metales férricos, no férricos y fracciones minerales en la planta de tratamiento de escorias. Recuperamos los materiales provinientes de los envases ligeros de la recogida selectiva en la planta de selección de envases. En la planta de metanización-compostaje producimos biogás y generamos compost gracias al tratatamiento de los residuos de la fracción orgánica de los residuos municipales (FORM), las podas y los lodos de depuradora (EDAR).
Situada en Son Reus, donde se gestionan las escorias procedentes de la planta de valorización energética. Se recuperan los elementos metálicos y la fracción mineral, materias primas secundarias que sustituyen a materiales vírgenes (metales extraídos de minas y áridos de canteras). Separar para reutilizar y evitar el uso de recursos naturales.
Ubicada en el área de Can Canut (Marratxí), en la que gestionamos los envases ligeros de la recogida selectiva (contenedor amarillo). Los envases seleccionados por tipo de polímero plástico se envían a los recicladores finales. Clasificar para reciclar y reutilizar.
Los envases se seleccionan automáticamente y clasifican en: PEAD (garrafas), PEBD (bolsas de supermercado), PET (botellas de bebidas gaseosas, de agua), MIX (mezcla de diferentes plásticos), cartón - aluminio para bebidas (bricks), aluminio y acero.
El personal contratado por TIRME para la operación de esta instalación proviene de la Fundación Deixalles.
Situada en Marratxí, en la que producimos biogás a partir de la fermentación anaeróbica de los residuos orgánicos. El biogás se quema en los motores y genera energía eléctrica 100% renovable.
Situadas en Marratxí, Calvià y Felanitx, en las que se produce el compost, enmienda orgánica de alto valor agronómico, que, posteriormente, es utilizado en agricultura, como abono orgánico para mejorar el suelo.
El compostaje de la fracción orgánica (FORM y lodos EDAR) mezclada con material estructurante (podas, serrín, ...) es un proceso de fermentación natural con presencia de oxígeno y a elevadas temperaturas (alrededor de los 60 -70 grados), mediante el cual, se destruyen los gérmenes, parásitos y las malas hierbas y se obtiene compost.
El sistema de tratamiento de residuos implantado en Mallorca se ha marcado como objetivo valorizar todos los residuos de entrada al servicio. Para aquellos residuos que no se pueden valorizar materialmente se ha optado por la valorización energética, que consiste en la utilización de los residuos como combustible. En la planta de valorización energética los residuos se transforman en energía. El 50% de ésta se considera renovable, consiguiendo de esta forma el vertido cero. Por otro lado en la planta de secado solar se tratan lodos de depuradora para producir biocombustible mediante radiación solar y calor residual que se aprovecha en la planta de valorización energética.
Situada en Son Reus, donde realizamos un aprovechamiento eficiente de la energía contenida en los residuos a través de su incineración, lo que nos permite conseguir nuestro objetivo de vertido cero.
Este tipo de instalaciones son técnicamente complejas y están diseñadas y explotadas de acuerdo con unos requisitos legales muy estrictos. Se trata de una tecnología de tratamiento de residuos ampliamente contrastada y de elevada fiabilidad.
En Mallorca, las dos primeras líneas de valorización energética entraron en servicio en marzo de 1997. La capacidad de tratamiento de estas líneas es de unas 300.000 toneladas al año. Actualmente contamos con dos líneas más, construidas con las últimas novedades tecnológicas, y con una capacidad de unas 430.000 toneladas al año.
Situada en el área de Can Canut, realiza el tratamiento de lodos digeridos, digesto y lodos no digeridos, lo que permite la obtención de biocombustible.
Las toneladas de lodos a tratar asciende a 40.000, con un producto final de alrededor de 15.000t de lodos secos, que se valorizan energéticamente.
Ningún sistema de tratamiento de residuos sería completo, seguro y eficaz, si no dedicase un capítulo a la eliminación de aquellos residuos que no se pueden valorizar. Por ello, disponemos de un depósito de seguridad para el vertido de las cenizas cementadas procedentes del proceso de incineración y de un depósito de rechazos, ubicado en Santa Margarita.
El depósito de seguridad ha sido construido para recibir las cenizas provenientes del filtrado de los gases producidos en el proceso de incineración en la planta de valorización energética de Son Reus, después de haber sido estabilizadas, mezcladas con cemento.
Se reciben los residuos provenientes de las plantas de tratamiento de residuos de construcción y demolición que no pueden ser valorizados material o energéticamente.
En un afán de mejora continua, TIRME pone a disposición de los usuarios un nuevo portal para la realización de pedidos de compra de compost.
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